miércoles, abril 29, 2020

La Brazada perfecta

Pues eso, que voy camino de los 49 años, pero más rápido de lo que quisiera, esto va muy deprisa copón, todavía llevo las chanclas de la playa en el maletero del coche con una miaja de arena del verano pasado, y ya estamos empezando un verano nuevo.. no doy abasto, se me echa el trabajo encima.
Pero de lo que quería escribir es de otra cosa. Después de tantos años nadando con la motivación de un novio en la noche de bodas, nunca  he conseguido nadar más rápido que en mis primeros años, sigo soñando con la brazada perfecta, y no hay manera. Ojo, no estamos hablando solo de sueños, no podría calcular a ciencia cierta cuántos videos he visto sobre natación, o publicaciones en revistas especializadas, o libros leídos sobre natación, sin contar los años nadando tres días a la semana  con entrenador, nada, todos estos  años he tenido un denominador común, !no nado un pijo!, por mucho que entreno no logro rebajar mi marca tanto en el 100 como en el 1000. Acho, es que me tiro dos meses sin nadar y sigo haciendo el mismo tiempo que si estuviera nadando tres meses, tres días a la semana, haciendo 3000 metros diarios, es increíble.  Pero no no hará quee.venga abajo, la piscina me debe un 1'15" en el 100 si o si. Así que desde el momento en que se nos permita volver a nadar allí estaré presto y dispuesto a  entrenar para lograr la brazada perfecta, pero es que voy más allá, estoy tan motivado que incluso voy a hacer un esfuerzo supino por lograr dar la voltereta entre largo y largo  con cierto criterio..
Aquí adjunto el enésimo libro que me sirve para ser un experto en natación, pero experto de salón...

No hay comentarios: